viernes, 5 de diciembre de 2014

Yo tengo un PAPÁ

Yo tengo un PAPA... alto, fuerte, moreno, churro como ninguno.

Yo tengo un PAPA, honesto, trabajador, leal... que me enseñó el valor de las cosas... y que me mostró lo importante que es luchar por lo que amamos.

Yo tengo un PAPA... y conozco cada uno de sus defectos, sé de sus errores y con todo eso, amo con todo mi corazón... con toda mi vida.

Yo tengo un PAPA... que me mima y me consiente a pesar de las veces que "me porto mal" o que me equivoco.

Yo tengo un PAPA que me aplaude y me ama.

Mi VIEJO es el mejor del mundo... el mejor de MI MUNDO!!!

Viejo

Viejo, sé que me amás demasiado. Me lo demostraste con TU GRAN GESTO. Sé que estás contento al ver tus resultados. TUS CUATRO RESULTADOS.

Viejo, me enseñaste más de las cosas que podía aprender. Poco a poco voy entendiendo tus palabras, tus acciones, tus silencios y hasta tus ausencias.

Papi, hiciste más cosas de las que puedo describir. Estoy orgullosa de ser tu hija. Estoy contenta porque sé que hiciste todo cuanto quisiste, de la forma que quisiste, aunque no comprenda todavía tus razones.

Papi, seguiré bailando como lo hacía con vos. Seguiré trabajando arduamente, como vos me mostraste con tus ejemplos, seguiré firme en mis decisiones y trataré de asegurar cada uno de mis pasos, recordándote en todo momento.

Papi, gracias por haber forjado tan fuerte mi corazón. Te amo y te bendigo.

Papito... que descanses en paz y que desde donde estés... sigas acompañándome. Estoy segura de que así será!

Qué pensás antes de dormir todas las noches?

Qué pensás antes de dormir todas las noches?

Qué recordás, cuando de madrugada te despertás y mirás el techo?

Qué canciones te llevan mi nombre, cuando vas por la calle, pensando en todo lo que no vivimos?

Te das cuenta que no llegamos a despedirnos? que fue más fácil y más cobarde, enojarnos y dejar que me alejara... sin ni siquiera permitirme mirarme en tus ojos negros?

Qué ves cuando mirás el cielo azul, todas las mañanas? qué esperás para dedicarme una oracion?

Yo, espero, todos los días que entendieras que no importa cuan lejos estemos, que no importa cuan enojados estemos... que no importa, si en el fondo, no me quisiste tanto como yo te quise...

Lo cierto es que... aunque nada haya sido cierto, todavía estoy tatuada en tu piel... todavía llego a tus pensamientos a desordenarte... a despeinarte... y sobre todo... que aunque no me hayas querido tanto como yo te quise... nunca nadie te habrá querido más.

Aunque

Estás en mis pensamientos. Injustamente, viniste a clavarte en mi mente y aunque intente dejar de pensarte, estás.

Quisiera entender, comprender, encontrar una explicación que calme mis preguntas, por qué pasó todo lo que pasó? por qué fue más sencillo "darnos las espaldas" y hacer como si fuera que no importamos.

Yo te quise. Quizás, en el fondo, también me quisiste. Ya no podré saberlo con certeza... quizás hasta te enamoraste y en el medio de tantos huracanes... nos perdimos... sin razón.

Todas las noches. Todas las mañanas. Todos los instantes.

Aun cuando preferiria darte "un hasta nunca"... no puedo. Dicen que el tiempo es el remedio. Que la distancia puede hacer que nos olvidemos. Estás de acuerdo?

Aunque no lo digas... yo sé que te acordás de mí, tanto como yo.

Aunque no lo demuestres, yo estoy segura de que no me olvidarás... jamás.

No pensé que sería fácil

No pensé que sería fácil. No, al contrario. Pensé que me costaría cada minuto, cada segundo. Que te pensaría antes de dormir, al despertar... que en mis sueños vendrías, sonriente, mirándome con tus enormes ojos negros... que tocarías mis manos y que yo iba a deshacerme de amor con cada caricia.

No. No esperé nunca dejar olvidados cada uno de tus gestos despistados... tus pasos lentos y tranquilos.

No. No dejé de recordarte, aun cuando me doliera tanto la distancia y que las palabras no hayan sido las más dulces.

No. No dejé de quererte. Todavía huelo tu perfume. Todavía veo el viento desordenar tus canas... todavía espero que esto ya no duela tanto.

Puedo

Puedo imaginarte aquí, a mi lado. Puedo sentir tu respiración en mi cuello y sentir tus besos húmedos en mis labios.

Puedo tocar tus manos y que entre tus canas mis dedos se pierdan...

Puedo imaginarte serio, soberbio, altivo y arrogante... varonil y seguro de vos mismo... como siempre.

Puedo mirar tus ojos negros, redondos y profundos... puedo incluso pedir que la vida te transporte y que me mires de esa forma que me encanta.

Puedo recitarte los poemas más cursis, inspiración de momentos como este, en los cuales la ridiculez se mezcla con el amor... que duele.

Puedo cantarte con la misma voz desafinada de siempre. Puedo tocar tus lunares, tus brazos fuertes... tus pecho amante.

Puedo... puedo muchas cosas... pero cuando despierto... me doy cuenta que el tiempo y la distancia no son amigos nuestros.

Amor de ojos negros

Amor de ojos negros y cejas anchas... amor de brazos y manos fuertes... aunque el frio llegue y la distancia nos una... aunque el viento se lleve cada una de mis palabras y en cada oración vaya un "te amo con todo lo que soy"...

Amor de voz serena, de andar tranquilo... amor de hombros grandes y piel tostada... aunque la paciencia nos duela y cuanto más te extraño, más lejos estás... aunque tu nombre hoy me sea desconocido...

Amor de tantas canas... amor de más de cuarenta años... amor maduro, pero inexperto... amor despistado y dulce... aunque te sorprenda saber que aun te quiero...

Amor de ojos negros y profundos... esos ojos, que me encantaría, me miraran antes de dormir... amor de besos suaves, besos que al recordarlos duelen hasta el alma...

Amor de casi dos metros. Amor donde estás? Donde estoy? porque a pesar de todo... tengo miedo de regresar.

Hey, vos, sabes?


Todas las noches, todos los dias, todos los momentos, te extraño.

Imagino conversaciones contigo... palabras que no vamos a pronunciar, reencuentros que no sucederán.

Te veo y te escucho aunque estemos a miles de km de distancia. tu pelo canoso se enreda entre mis dedos y tus ojos, grandotes, negros, profundos se clavan en mi cuerpo y yo... todavia te quiero.

Aunque no merezcas ni un solo pensamiento. aunque no seas capaz de entender ni una sola palabra...

Aunque seas menos que un recuerdo... aunque a pesar de todo... todavia te quiero.

Aunque te lleves mis sueños y en la obscuridad... te escondas para besarme sin permiso.

Aunque te espere y sepa que no vendrás.

Aunque tanto... y tan poco.

Aunque pase tanto... y todo eso sea nada.

Te quiero. te extraño. te espero.

Si tuviera que amarte

Si tuviera que amarte de noche, miraría en el fondo de tus ojos negros y nadaría buscando la orilla para sentarme a contemplar la luna.

Si tuviera que amarte de madrugada... rozaría tu piel morena para anclar mi vida en el desierto de tus muslos. Esperaría que tus espasmos se volvieran incontenibles y que me pertenecieras por completo.

Si tuviera que amarte por las mañanas... me enredaría entre tus canas y me perdería entre algodones y estrellas clandestinas. Viviría conversando sobre eclipeses y lluvias fugaces.

Si tuviera que amarte por las tardes... mojaría tus mejillas con besos tibios, con caricias que erizan... con esperanzas que renacen. El canto de los pájaros y las cigarras de diciembre... entonarian tus melodias favoritas.

Si tuviera que amarte un día entero... lo haría con gusto. Viviría cada instante como el más intenso. Me despojaría de ataduras y trapos que ocultaran mis cicatrices. Compartiria contigo todos mis lunares y marcas de nacimiento.

Si tuviera que amarte para siempre. Seguro que lo haría. Es más, ya te amo para siempre.

domingo, 23 de noviembre de 2014

En nombre de mi PADRE

Palabras que describan todo el amor que siento por vos, no existen. Todas se quedan cortas para expresar lo inmenso que es este sentimiento. Sé que vos me amás tanto como yo. En cada una de las cosas que compartimos, vos me demostraste siempre cuanto me querés… en las serenatas, al ir juntos al super, al juntarme las tapitas… al aprender cosas para comunicarte conmigo.

El día que recibí tu primer mensaje, me llené de felicidad… no hubo un día en que no te pensara y le pidiera a Jesús que te tuviera dentro de su corazón, para que nos encontráramos de nuevo y compartiéramos tiempo juntos… tomando tereré, leyendo el diario o conversando.

A veces nos enojábamos… yo sé… ambos tenemos “un caractercito”… pero nos entendemos tanto! Yo sé que vos me respetás como hija, como mujer, como persona… que celebrás todos mis triunfos… que me mimás… y que me levantás cuando me equivoco.

Sos ejemplo de trabajo, esfuerzo, dedicación y honradez. Ahora entiendo muchas cosas que en su momento me confundían mucho. Ahora entiendo que todo lo que hacías, tenía un mensaje para que aprendiéramos lo importante de salir adelante por nuestros propios medios. Espero estar a la altura de tus parámetros, para que siempre estés orgulloso de mí.

Nunca dudé de tu cariño, pero ahora reconfirmé lo grande y bendito que es. Te agradezco con todo mi corazón que me hayas esperado y el compromiso que ahora nos une, es muy grande e importante. Haré todo para honrarte, porque es lo justo, es lo que te merecés.

Hasta el último minuto hiciste tu berrinche… yo sé. Nada nunca te detuvo… tu ímpetu y tu terquedad… te construyeron, para que seas lo que fuiste, un hombre íntegro e independiente… como te gustaba.

Físicamente no estarás con nosotros. Vas a usar otras maneras para manifestarte… yo sé. Y escucharemos tu opinión, quizás en el viento, en una canción, en una señal… y serás respetado, como siempre te respetamos.

La puntada en mi pecho estará presente todo el tiempo. Voy a aprender a vivir con esto. Voy a aceptar lo que pasó… y todos los días, en las cosas que haga… vas a estar presente. Tu espacio es demasiado grande… es un vacío inentendible.

Ahora el mburukuja tiene un nuevo significado. Las naranjas van a ser más dulces.

Voy a aprender a vivir con tu ausencia. No sé cómo, pero aprenderé. Voy a salir adelante y voy a brillar, por vos, PAPI, porque es lo que te merecés. Quiero que estés contento. Sé que me vas a acompañar en todo lo que haga. Que me vas a cuidar y que me bendecís, desde donde estás… seguro que al lado de Jesús.

Te amo, todo en la vida, PAPI. Te extraño y te bendigo.

Gracias por todo!!!

martes, 11 de noviembre de 2014

Todavía

Todavía me acuerdo de tus brazos fuertes abrazandome.

Tu respiración agitada en mi cuello.

Tus labios timidos y húmedos besando mi piel.

Todavia siento tus piernas enredándose con las mias.

Tu cuerpo moreno temblando con cada caricia.

Siento tus manos recorriéndome.

Y tus ojos oscuros clavándose en mis pupilas.

Tu barba raspando mis pechos.

Siento tus latidos muy cerca de mi corazón.

Tu voz envolviéndome y tus gemidos reconociendo que me amabas.

Todavia te siento a mi lado, como siempre, como antes, despistado, altivo, varonil.

Siento tu perfume embriagándome.

Imagino tus gestos, escucho tus muletillas… hasta tus malas palabras.

Pienso que las cosas no deberían ser así… que esto no debería doler tanto.

Todavía busco explicaciones.

Intento entender.

Intento consolarme.

Intento. Lo juro… pero por lo visto, todavía no es el momento.


jueves, 6 de noviembre de 2014

Yo te invito esta noche

Sí. Puede ser que compartamos una amena charla... que bebamos algo en honor a lo que fuimos... a lo que amamos y a lo que falta por descubrir.

Te invito a ver las estrellas que brillan, como brilla tu mirada cuando se enfoca en mis mejillas... te invito a que mientras cae la noche, estés sentado a mi lado... respires el mismo aire que yo... y que observemos como pasa el tiempo... y que este no importa nada... si vos no estás acá.

Te invito a que esperes el amanecer desvelándote conmigo. Que mientras el frío nos envuelva, vos y yo podamos conocer qué hay más allá de todo esto. Qué puede existir después de que llegue el momento de decir la verdad.

Te invito. Sí. A que vengas para construir conmigo sueños que busquen realidades... que dejes que el todo y la nada se unan y que de esa unión, quizás absurda, florezcan esperanzas para continuar.

Sí. Ojalá vengas. Ojalá tengas el valor de aceptar las oportunidades que no van a llegar dos veces.

Ojalá tengas el coraje suficiente para perdonar, perdonarnos y sobre todo... para pedir perdón.

Te invito esta noche. Si no venís, que es lo más probable... confirmaré que el miedo, como siempre... te paralizó.

lunes, 6 de octubre de 2014

De qué sirve quererte?

Si me pongo a pensar en lo que vos me hacés sentir, primero tengo que aclarar que, por más que en el fondo aun seas alguien importante en mi vida, cuando pienso en las cosas que nos pasaron, vienen a golpear mi mente cada uno de los momentos tristes que me dedicaste.

Si tengo que decir lo que representás para mí, tengo que reconocer que tu nombre me duele mucho. Que aun cuando quiera acordarme de vos con cariño... no puedo hacerlo. Pienso en todo lo que pasamos... y únicamente vienen a mi mente razones para enojarme más y más. Sé que es mi culpa también por haber dejado que lleguemos a esta situación... pero sabés? por más que quiera perdonarte... no puedo.

Si pienso en lo mucho que lloré, no puedo decir es solo tu responsabilidad... confié en vos y bajé la guardia, te di mi corazón y dejé que tu presencia poco a poco vaya apoderándose de mis sentimientos. Sé que no puedo negar que me metí en esto sabiendo cuales eran las reglas... pero en el fondo, ingenuamente, como una adolescente, me enamoré.

Repaso cada instante. Cada beso, cada caricia. Revivo cada uno de tus gestos y cada mirada que me dedicaste. Sabés? no puedo aceptar que todo fue una farsa y que solo me mentiste. Algo habrá habido de realidad... en algún instante desatinado... algo de lo que me dijiste tuvo que haber sido verdad... no puede ser que me hayas mentido siempre... y con alevosía.

No sé si de algo sirve perder el tiempo y en vez de decirte de frente todo esto... me sumerjo todas las noches, debajo de las sábanas para esconderme de tu recuerdo y escapar, aunque en el fondo nada de lo que pase disminuya la tristeza.

Creo que pasás los días y ni siquiera te acordás de mí. Que te olvidaste de todo cuanto te quise y de como se me erizaba la piel, con tenerte cerca. Habré sido muy infantil... habré dejado mucho de mí en cada segundo que compartí contigo... quizás si hoy me recordás... no signifique nada... que lo que hubo, en el fondo... "no significó nada".

No sirve de nada escribirte, ni recordarte... ni pensarte... sé que gasto mi vida buscando explicaciones, cuando en realidad... no sirve de nada quererte... y menos aun... recordarte.

jueves, 4 de septiembre de 2014

Más de la mitad

Aunque las heridas duelan tanto y las palabras sigan golpeando mi memoria, aunque en las noches cuando veo tu foto, tengo ganas de gritar la tristeza que todavía causás en mí.

Todavia, a pesar de las madrugadas de insomnio, todavía, a pesar de las veces que me dejaste esperando señales y razones para creerte, a pesar de eso, todavía...

Escribirte de nuevo, no es fácil, quise dejarte atrás, borrar mi amor por vos y convencerme de que nada de lo que pasó entre nosotros, ocurrió en realidad.

Quise meter en un cajón todos mis sentimientos. Quise olvidarme por un instante de todas las lágrimas que derramé.

Por más que las canciones digan más de lo que deban, por más que las noches sigan viviendo con tu olor... y que tu nombre, aunque no me guste, se clave en mis pensamientos.

A pesar de todo eso... yo todavía te regalo la mitad de mi amor. La otra mitad me la guardo, porque el dolor ha sido tan intenso y ha durado tanto... que solo me queda el consuelo de pensar... que más de la mitad, ya no vas a llevarte.

domingo, 29 de junio de 2014

Se acabó

Aunque es lo mejor, no puedo negar que me duele mucho la situación.

Aunque el hartazgo se haya apoderado de mi vida hace tanto tiempo y que piense que no puedo seguir soportando más, no niego que me parece tan triste y desagradable tener que aceptar que no me quisiste nunca.

Que siempre fui un canal de escape, una razón para olvidar los mambos, una diversión "barata" y una excusa para reir. No sé porqué sabiendo que todo esto me indigna, puedo seguir pensando que "me duele".

Ojalá pudiera ser capaz de ser valiente y dejar atrás todo esto. Olvidarme y olvidarte.

De qué sirvió todo lo que hice? de qué sirvió cuanto te quise?

Dejé mi vida pasar, dejé mi voluntad ser pisoteada muchas veces... dejé de pensar en mí misma y dejé que mi mente imaginara una "vida paralela" que jamás será realidad. Una esperanza "inexistente", una realidad "irreal".

Quizás fui tonta. Quizás ingenua. Qué se yo!

Me duele saber que ya no hay nada. Que quizás no hubo nunca nada y que yo nomás "me armé la película". Que yo nomás sentí todo cuanto sentí y que... debí haber aceptado "el papel" que me dabas.

Cuantas noches te soñé. Muchas mañanas te imaginé. Muchas madrugadas desperté pensando en vos. Cuantas veces en la lluvia te tuve a mi lado y vos ni siquiera te dabas por enterado.

Aunque duele todo esto. Aunque quizás seré débil otra vez... aunque quizás en algún momento te voy a mirar de nuevo... y en ese momento renacerán en mi corazón tantas tempestades... necesito encontrar las razones justas para "desterrar" tanta tristeza.

Duele todo esto. Dolió desde el principio.

Al hacer un balance de todo lo que pasó... llego a la conclusión "amarga" de que siempre me mentiste, me engañaste y me usaste. Sé que, de alguna manera, yo permití y fui cómplice... sin embargo... como hago para terminar de llorar todo lo que tengo que llorar y todo cuanto tengo que perdonarme?

Se acabó. Espero que sí, que definitivamente se haya terminado.

jueves, 19 de junio de 2014

Amo el amor que nace en tus ojos

Amo cada gesto, cada mirada, cada palabra.

Imagino todas las noches una caricia que erice mi piel y que toque cada una de las notas de mi cuerpo. Todas las noches espero una señal clara y concreta de lo cerca que podés estar de mí.

Amo todas las canas en tu pelo. Cada surco que marca tus labios, cada parpadeo que das. Amo el espacio entre tu cuerpo y el mío; amo el aire que respirás, amo tu olor, tu calor, tus movimientos.

Todas las noches toco con mi mente tus manos y me enredo entre tus brazos. Todas y cada una de las madrugadas te tengo a mi lado, abrazandome fuerte, llevandote cada suspiro de mi vida.

Amo tu altura, lo inmenso que me parecés cada vez que te miro. Amo tu espalda ancha, mano tus manos, tu piel y tu barba. Amo lo cerca que estás y lo lejos que se me hace para poder tocarte.

Amo tus silencios. Tus explicaciones que nunca entiendo. Amo que tengas la razón, aunque no me guste. Amo que estés ahí...

Amo tus ojos. En ellos, yo me pierdo.

domingo, 8 de junio de 2014

No pude evitarlo

Intenté ser normal. Intenté disimular y convencerme de que podía manejar la situación y que no me iba a "descarrillar" como las veces anteriores, pero no pude.

Quise, lo juro. Quise ser una mujer integra y comedida. Quise entender que no siempre se tiene lo que se quiere y que muchas veces, quienes te quieren, no pueden estar contigo.

Procuré con todas mis fuerzas, ser una persona estable... y no dejarme llevar por mis impulsos... intenté! muchísimo! Solo que fue... muy difícil.

No estoy orgullosa de lo que pasó... una vez más. No puedo negar, sin embargo, que mi corazón está más tranquilo. No puedo negar, tampoco... que prefiero que me odies y estar segura que no volverás... a tener que vivir con la incertidumbre... será que me querés? será que alguna vez estaremos juntos? será que alguna vez entenderás cuanto me importás? será que... no! yo sé, que no es lo mejor, ni lo más cordial... pero prefiero profundamente que no me soportes y que me tengas rabia... así... protejo mi corazón... y mi amor.

Intenté controlar mis sentimientos. Intenté no decir "malas palabras". Intenté no dejarme vencer por el miedo... pero no pude. Por más que le puse mi energía a todo cuanto hice, lamento no haber sido capaz.

Reconozco mi debilidad y mi inmadurez. Reconozco que no soy lo que esperabas... que soy mucho más y que sin embargo... nunca fui suficiente.

Lamento haberme conformado con tan poco. Lamento no haberme respetado cuanto merezco y lamento no haber sido capaz de marcharme antes.

Sé que ahora soy "la mala", "la desubicada", "la bipolar". Sé que nada de lo que haga ni diga dará marcha atrás a lo que hoy pensás de mí... y me alegro. Eso garantiza que habrá la distancia que hace tanto necesito.

No pude evitar ser grosera, mal educada... irónica... no pude evitar insultar y decir lo que no pienso. No pude evitar parecer "una loca", "una enferma". No pude evitar guardar mi miedo... porque este fue creciendo y apoderando de mi alma.

Lo que hice, estoy segura, que no fue lo mejor... sé que quedé como "paranoica"... sé que no es lo "esperable" de una dama... en realidad... no soy una dama... soy apenas una mujer con miedo y harta de ocupar un lugar que no me pertenece y que no merezco.

No pude evitarlo. Lo intenté. Puse todas mis fuerzas para domar a "la fiera" que habita en mí.

No pude. Creo que fue lo correcto.

martes, 3 de junio de 2014

La mentira

Desde hace días quiero escribirte.

No sé qué ha impedido hacerlo. Sé que con el tiempo este blog desaparecerá. Que nadie nunca sabrá de su existencia y que sin embargo... aquí se plasmaron todos los sentimientos y "los nudos en la garganta" a punto de explotar.

Sé que no sabrás que aquí te dejé mucho más de lo que podrías creer. Sé que no serás capaz de entender cuán duro ha sido todo este tiempo. Sé que todo lo que aquí está escrito... no lo vas a entender... ni valorar jamás.

Seguro que la "bipolaridad" es un rasgo que me caracteriza. Sé que muchas veces te reiste de mí y que encontraste muchas razones para "burlarte". Sé que no soy aquello que esperás y que lo que esperás es muy mediocre.

Sé que soy muy caprichosa. Que soy infantil y que soy inestable. Sé que por más que "quizás intentaste"... lo que encontraste "no es lo que esperabas"... y sabés por qué? porque soy mucho más de lo que te merecés.

Entiendo que las cosas no sucedan como queremos. Que todo tiene su tiempo y que "nuestro tiempo" hace mucho que terminó... que intenté arrastrar y que "aguantara" un poco más... pero eso lo único que hizo fue alargar la tortura.

No sé si estuvo bien. Creo que no. Pero el egoísmo muchas veces nos obliga (sin darnos cuenta) a hacer cosas que "nos duelan menos" por simple cobardia. Creí que todo cuanto podiamos lastimarnos era más que suficiente... pero no.

Todavía el fantasma de la mentira me ronda. Todavía aparece por las noches y me toca con las manos frías, con la intención de despertarme de la ilusión de creer que "nos queremos". Yo pensé que el amor existía... pensé que era un sentimiento que, por más que no pudieramos compartir, nos permitiría sentirnos completos.

Yo pensé que el amor podía "hacer que nos aceptaramos" con cicatrices y con golpes del pasado.

Me equivoqué.

Pensé muchas cosas. Pensé que la mentira ya no era capaz de dolerme.

Sí. Me duele aún.