Tengo muchas ganas de hablar contigo. No sé de qué hablariamos, pero me gustaría hacerlo.
Quisiera poder escribirte cosas sin sentido, aun cuando pueda parecerte tonto... o que ni le prestaras atención.
Quisiera poder mirarte y saber que aun podemos ser amigos. No sé, a lo mejor esto sea pedir demasiado y ya no vale la pena.
Hablarte, nada más. No tengo declaraciones de amor, ni reproches, ni poemas.
Con saber que podemos mantener una conversación, es más que suficiente.
Yo quisiera.
Pero a veces eso no basta.