La libertad que me das para que la use de la mejor manera posible. De modo que haga de ella un instrumento para cambiar al mundo... una libertad tan libre que me inspira a dar de mí más de lo que tengo... a luchar por todo lo que creo que es bueno... y a perdonar... lo que puede ser perdonado...
En una libertad tan grande y tan infinita... que me aprieta las manos para sentirme segura cuando siento que me tiemblan los pies... cuando tengo que tomar una decisión "de vida o muerte"... cuando tengo que ser yo misma... aunque tenga miedo de perderme...
En el fin del mundo... cuando la necesidad de reconocer la libertad se apodere de mí y tenga que mirar al pasado... para resumir mi vida... con seguridad me sentiré plenamente satisfecha... por haber pagado tantas veces el precio del amor y haberme dado las licencias para cometer errores y para ser feliz... libre.
En las pasiones que me envuelven... yo converso con la luz, con el sol, con el viento... y ahora con el mar y las montañas... la libertad que me das todos los días... esa libertad que me regalás al abrir los ojos, es la que me da vida y me da la fuerza para seguir.
Jesús... dame sabiduría para usar mi libertad. Dame inteligencia para que mi libertad me acerque a vos... y que mi destino sea el que vos tenés preparado para mí.
Jesús, que mi libertad resucite contigo.
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