Dame tu mano porque en tus dedos yo me pierdo, cada uno de tus dedos me reconoce, me entiende, me ve, me ama. Quiero que si me tomás en tus manos, puedas responder a todas mis dudas, a todos mis miedos, que me protegas y que me quieras, tal como soy.
Dame tu mano. Con esas mismas que cerrás una puerta, escribís una carta, apretás fuertemente otra mano... esa misma que con fuerza y firmeza me protege, me cuida, me entiende.
Dame tu mano, esa con la que hacés que llore la guitarra, con cada acorde que le sacás, con que tomás un vaso, un libro, una flor. Esa misma que te viste, te perfuma, te abriga, esa mano... esa.
Dame tu mano, dame la tuya... que la mía también te pertenece.
No hay comentarios:
Publicar un comentario